Se acerca el Día de Muertos y, aunque en muchas culturas católicas se celebra el Día de los Fieles Difuntos, en México esta festividad tiene un toque único. Nuestra relación con la muerte está profundamente marcada por un sincretismo que surge desde la época de la Conquista. Los antiguos pueblos que habitaban México, como los mexicas, los mayas y los zapotecas, eran politeístas y contaban con deidades de la muerte, como Mictlantecuhtli, Ah Puch y Pitao Pezelao, respectivamente. Para ellos, la muerte no era el fin, sino el paso hacia una vida más allá de lo conocido.
Mictlantecuhtli, dios de la muerte Mexica, exhibido en el museo de Templo Mayor de Ciudad de México.
Este respeto y culto hacia los ancestros formaba parte de sus rituales funerarios. Al morir, se realizaban ofrendas, se recordaban los buenos momentos y se organizaban ceremonias para ayudar a guiar a los difuntos hacia el otro mundo. Estas prácticas prehispánicas se han fusionado con el catolicismo, dando como resultado la celebración que conocemos hoy: el Día de Muertos, una mezcla de nuestras raíces indígenas y creencias cristianas.
La forma en que celebramos el Día de Muertos varía de una región a otra. En mi experiencia personal, recuerdo levantarme temprano para ir al panteón con mi familia. En aquel entonces no comprendía el verdadero significado de la fecha, pero ahora lo sé: el Día de Muertos es un momento agridulce, donde recordamos a nuestros seres queridos que ya no están. Aunque puede ser triste, nos enfocamos en traer a la mente los buenos recuerdos y en honrarlos con ofrendas de sus platillos favoritos, bebidas, o algún objeto que les brindaba alegría.
Mujer vestida como 'La Catrina', una figura icónica que representa la muerte durante el Día de Muertos.
Al llegar al cementerio, se puede observar una escena espectacular: flores, altares llenos de detalles y gente que, aunque lleva consigo la tristeza de la pérdida, sonríe al reencontrarse con sus familiares fallecidos. Según la creencia popular, durante estos días, nuestras familias regresan del más allá para estar con nosotros, y todo lo que preparamos es para agasajarlos en su visita.
Esta festividad no representa el fin de la vida, sino una celebración de ella. La música, los altares y los platillos favoritos de nuestros difuntos forman parte de la vida que todavía nos une a ellos.
Uno de los elementos más significativos es el altar, que tiene sus raíces en las tradiciones indígenas. Los altares, llenos de simbolismos, nos conectan con nuestros antepasados. El arco simboliza la puerta para que los ancestros crucen a este mundo; las velas y las flores de cempasúchil funcionan como faros que guían su camino; la cruz de sal protege contra los malos espíritus, y el vaso de agua está ahí para saciar su sed tras el largo viaje. Todo esto forma un diálogo con nuestros seres queridos fallecidos.
Altar de muertos tradicional
Cómo Celebrar el Día de Muertos con Respeto
Para los que visitan México durante el Día de Muertos, esta celebración es una oportunidad única para sumergirse en nuestra cultura. Sin embargo, es esencial hacerlo con respeto y sensibilidad hacia las tradiciones locales. Aquí tienes algunas recomendaciones para disfrutar de la experiencia de manera apropiada:
Evita tomar fotografías sin permiso: Si visitas un cementerio o ves a personas celebrando en un altar, no tomes fotos sin su consentimiento. Están en un momento íntimo, y aunque la escena puede ser visualmente impactante, recuerda que no todo debe ser compartido en redes sociales.
Viste de manera respetuosa: Aunque es divertido pintarse la cara como una catrina o usar trajes tradicionales, asegúrate de que tu atuendo sea respetuoso y apropiado para la ocasión, especialmente si visitas cementerios o comunidades indígenas.
Respeta los altares: Los altares son sagrados para las familias que los construyen. Evita tocar los objetos en los altares o interferir con ellos de cualquier forma. Si ves uno en la calle o en una casa, admíralo desde una distancia respetuosa.
Participa en las actividades locales: En muchas ciudades y pueblos de México, se organizan desfiles, ferias y eventos culturales. Participa en ellos, pero con respeto. Aprende sobre los significados detrás de las tradiciones y mantén una actitud abierta para comprender su profundo simbolismo.
Evita interrumpir momentos de oración: Si ves a alguien rezando frente a una tumba o un altar, da un paso atrás y permite que tengan su momento en privado. La oración es una parte fundamental de la conexión con los difuntos durante el Día de Muertos.
Sé consciente del entorno: Si visitas un cementerio, mantén tus ojos abiertos, en algunos momentos será tiempo de celebración, pero otros son de respeto y recato.
Apoya a los artesanos locales: Durante el Día de Muertos, muchas comunidades producen artesanías relacionadas con la festividad, como calaveritas de azúcar, papel picado y flores de cempasúchil. Comprar estos productos no solo te permite llevar un recuerdo único, sino que también apoya a los artesanos locales.
Involúcrate con respeto: Si te invitan a participar en la creación de un altar o a una celebración familiar, siéntete honrado. Haz preguntas de manera respetuosa, escucha y aprende sobre los significados detrás de cada elemento.
Aprende sobre la historia y los significados: Tómate el tiempo para aprender sobre la historia del Día de Muertos antes de participar. Comprender el sincretismo cultural que lo caracteriza te permitirá apreciarlo de una manera más profunda y significativa.
El Día de Muertos es mucho más que una celebración visualmente impactante; es una conexión espiritual y emocional con nuestros antepasados. Con respeto y sensibilidad, cualquier persona, sin importar de dónde venga, puede formar parte de esta tradición milenaria y apreciarla en su totalidad.
mjga
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